Intérpretes. Algunos de los artistas que participan en el disco, durante su presentación la semana pasada en Sevilla.

Si, en el pasado, El Turronero cantaba Andalucía por tangos y, en 1977, un malogrado cantaor le rendía homenaje en forma de cantata a Blas Infante, el himno oficial de esta tierra, basado en el del célebre notario de Casares, había merecido interpretaciones tan diversas como la de Rocío Jurado –en La Lola se va a Los Puertos, de Josefina Molina–, Joan Manuel Serrat, Amigos de Gines, Jarcha, Carlos Cano o el barítono malagueño Carlos Alvárez. Ahora, el comunicador Manuel Curao –Canal Sur– ha logrado, como director artístico de esta empresa y con el respaldo de Isidro Muñoz como productor, cuajar doce nuevas interpretaciones, estrictamente jondas, en un disco memorable que no sólo demuestra la vitalidad del citado himno sino de los diferentes palos del árbol genealógico del jondo, que son capaces de brindar un abanico de sonidos diversos y atractivos, con independencia de que la letra sea la misma en todos ellos. O, más o menos.

Más o menos, porque ninguno de los invitados a esta aventura, se repiten como una gota de agua. Antes bien, juegan con las palabras, reinventándolas, recreando sus frases y estribillos, haciéndolas al unísono iguales y distintas: "No sólo no es lo mismo, sino que es tan distinto que parece otra cosa", asegura su impulsor Manuel Curao. El disco se titula Flamenco por Andalucía, España y la Humanidad y se trata de la primera producción de la Agencia Andaluza del Flamenco, dependiente de la Consejería de Cultura y dirigida por Alberto Bandrés. La grabación ha corrido a cargo de la productora Szena y su distribución tiene lugar a través de instituciones, con motivo del Día de Andalucía que se celebra hoy.

En los créditos de esta obra coral, figuran, entre otros, Paco de Lucía, Fosforito, Enrique y Estrella Morente; Manolo Sanlúcar, Dorantes, José Mercé, Juan Peña El Lebrijano, Esperanza Fernández, Tomatito y su hija, María de los Ángeles, Chano Lobato, Carmen Linares, Marina Heredia, María de los Ángeles, José Antonio Rodríguez, El coro de Julio Pardo, Moraíto, Diego del Morao, Arcángel, Dorantes, Niño Miguel, El Capullo de Jerez, y Fernando de la Morena. Se enfrentan sucesiva y armónicamente a una selección que incluye, por ejemplo, verdiales y jaberas de Málaga, cantes mineros al estilo de Linares y Almería, soleá, seguiriyas, cantiñas de Cádiz, tangos de Graná, fandangos de Huelva y de Lucena, bamberas y bulerías.

Se trata, según aseguró afortunadamente la consejera Rosa Torres, de "una suerte de bordado, entre la tradición y las voces más nuevas del flamenco". A su juicio, se trata de "una estupenda carta de presentación a todos los ciudadanos del sur, ya que nace con vocación de representar la diversidad y riqueza de cada rincón de Andalucía a través de los cantes flamencos".

"Tenemos la suerte de tener un himno hermoso como para prestarse a las interpretaciones que aquí se han grabado –cree ella–. Al escucharlo podemos realizar un triple itinerario; por nuestros cantes, por nuestros mejores artistas y por nuestra geografía".

La ejecución del proyecto se ha prolongado durante un año y no sólo ha sido necesario adaptar la letra de Blas Infante sino la melodía del maestro Castillo. En ese contexto, el papel del productor Isidro Sanlúcar ha resultado fundamental para que dichas recreaciones no resultasen monótonas sino consecutivamente creativas. Así que no extraña que, desde la bulería de Paco con El Capullo y Fernando de la Morena a la orquestal de Manolo Sanlúcar con arreglos de Joan Albert Amargós, se haya logrado, como señaló el cantaor Antonio Fernández Díaz 'Fosforito', para quien ya se ha propuesto la concesión de una nueva Llave de Oro del Cante, algo así como "una verdadera antología del flamenco, pues eso es este disco, una pequeña antología".

El proyecto era de locos, reconoce Curao, pero Isidro Muñoz "logró ponerles la camisa de fuerza a todos ellos". A los palos y a los artistas. Desde Tomatito y su hija Ángeles, que lo cantan por tarantas y cargaderas o Enrique y Estrella Morente, padre e hija, que la interpretan por seguiriyas. Mientras José Mercé y El Lebrijano se enfrentan en un duelo mítico por soleares, la bulería también es el palo elegido por Esperanza Fernández sobre el piano de Dorantes. Chano Lobato y el coro de Julio Pardo la meten por alegrías y Arcángel rescata el toque del legendario Niño Miguel para interpretarlo por fandangos. A Manolo Sanlúcar no sólo le escolta una orquesta sino que pone su guitarra al servicio de Carmen Linares, por tarantas. Mientras Marina Heredia apuesta por los tangos del Sacromonte granadito y una panda de verdiales de Málaga se suma a este muestrario en donde tampoco falta Fosforito por fandangos, con la sonanta de José Antonio Rodríguez.

"Pensábamos que hacer doce versiones de una misma cosa se iba a convertir en algo muy monótono. Y todavía estoy sorprendida con lo que ha salido", resumió la de Linares. Y cualquiera que escuche esta obra lo ratificaría.

Puedes oir el disco completo en fragmentos de entre 30 y 40 segundos siguiendo este enlace

Flamenco por Fermín Lobatón y Juan José Téllez